Durante todo el mes de enero y la primera quincena de febrero, de miércoles a sábados se realizaron actividades culturales y recreativas para toda la familia en el Recreo del Tigre. Hubo talleres de arte, artesanías, macramé, torneos de truco, lotería familiar, kermesse, entre otras cosas. También estuvo presente la feria de artesanos y el Patio Cervecero, con propuestas de música en vivo todos los sábados.

Las tardes comenzaban con actividades para la familia: los miércoles se realizaron murales colectivos con tiza en los que se trabajaban distintas temáticas vinculadas a las vacaciones y los juegos en familia. Así, cada miércoles quedaba plasmado un hermoso mural colorido en la puerta del quincho grande que permanecía ahí hasta el siguiente miércoles. Esta actividad fue un verdadero hallazgo del verano y un espacio de enriquecimiento grupal. En la misma confluían chicos de todas las edades y también muchos adultos que quisieron dejar su huella participando del dibujo y acompañando a los más chiquitos.

Los jueves se realizaron distintos talleres. Uno de los más convocates fue el de armado de pulseras y collares con mostacillas. Así todos los participantes, tantos niños como adultos, se llevaron sus realizaciones para lucir en el verano.

Los viernes se realizó el taller de macramé, enseñando las técnicas para principiantes, y un taller más avanzado para los que ya tenían algo de conocimiento. Se hicieron trenzas para el pelo, pulsera, collares y artesanías. Este taller aunó a la familia dado que muchos niños venían acompañados y trabajaron para aprender la técnica y realizar creaciones juntos.

Los sábados por la tarde era la hora de la kermesse familiar en el quincho grande con 8 juegos para participar en familia y juntar puntos. Los mismos se podían canjear en el kiosco de la kermesse por caramelos, colitas de pelo, stikers, pelotas, cartas, mates, tabla para el asado, jenga, etc.
Fue un espacio que les gustó mucho a los concurrentes porque muchos optaron por acumular puntos los distintos sábados y cambiarlos al final del verano por un premio más grande.

En la segunda parte de la tarde fueron los adultos quienen tuvieron su espacio para jugar y participar: la lotería familiar y el campeonatop de truco fueron las actividades más convocantes y, por supuesto, las bandas en vivo dieron un sabor especial al fin de semana. El patio cervecero presentaba propuestas tentadoras que incluían rabas, pizzas, picadas y papas fritas con precios súper accesibles y la barra de tragos y licuados que acompañaba toda la tarde.

Fue un gran verano, con mucha participación y juego, con encuentros y arte, de familia y río.

Gracias a tod@s nuestr@s compañer@s que trabajaron todo el verano para que los afiliados y sus familias vivan esta temporada.