Por Miguel Jorquera
La decisión del Tribunal Autónomo Arbitral de repetir en su totalidad las elecciones de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) en tres provincias –Mendoza, Tucumán y Misiones– y las mesas impugnadas en otros ocho distritos volvió a dejar todo en veremos y produce un final abierto sobre quién conducirá la central sindical en los próximos cuatro años. “Cuando muchos se autoproclamaban ganadores, nosotros decíamos que la flecha estaba en el aire. Y todavía está en el aire”, concluyó Hugo Yasky en rueda de prensa al anunciar la decisión del tribunal de juristas. En tanto el estatal porteño Pablo Micheli afirmó, a través de un comunicado, que la resolución del tribunal “ratifica la victoria” de su lista “por 11.500 votos”, por lo tanto “es el nuevo secretario general”.
“Ahora el proceso electoral está abierto. Tenemos la oportunidad de limpiar las manchas de barro y las heridas que cayeron sobre la CTA y no nos interesa hacer ningún vaticinio triunfalista. Ahora, hasta el último afiliado de la CTA va a tener la oportunidad de emitir su voto y elegir a las nuevas autoridades”, señaló Yasky, quien sostuvo que hasta que se defina el proceso eleccionario continuará como secretario general de la CTA.
Pero Yasky también volvió sobre las críticas y denuncias que había volcado sobre sus competidores, sin mencionarlos. “En este momento en el que es tan difícil para los que queremos construir un sindicalismo sin fraude, sin violencia, queda abierta la convocatoria a elecciones y vamos a garantizar que en las diez provincias en las que hay que votar nuevamente se haga de manera transparente”.
De esta manera, la Lista 10 fue quien anunció ayer la decisión del TAA cuya integración y convocatoria había sido pactada de antemano entre las dos principales listas que competían por la conducción de la Central, para dirimir los posibles conflictos que se plantearan en el proceso electoral y cuya resolución ambas listas se comprometieron a respetar. La intención era que en caso de denuncias de irregularidades –como ocurrió– se evitara ir a la Justicia y el arbitraje del Ministerio de Trabajo para acudir a una instancia que ambas partes juzgaron de antemano que sería imparcial.
Según Yasky, el tribunal presidido por Ricardo Cornaglia, e integrado por los también abogados Luis Enrique Ramírez, Beinusz Szmukler, Moisés Meik y Eduardo Tavani, declaró “la nulidad del resultado registrado” por la Junta Electoral Nacional y resolvió “realizar nuevamente el proceso electoral” en Misiones, Mendoza y Tucumán, y en el distrito bonaerense de Esteban Echeverría. También agregó las mesas impugnadas en las provincias de San Juan, Catamarca, Santiago del Estero, Salta, Jujuy, Santa Fe y Córdoba. Los votos de todos esos distritos, estimó Yasky, podrían revertir la ecuación electoral a su favor.
En cambio, para Micheli “las resoluciones del tribunal ratifican la victoria de la Lista 1 Germán Abdala por 11.500 votos”. De acuerdo con la interpretación de Micheli, “con lo dictaminado por el tribunal no se modifica la tendencia favorable de votos” para su lista.
En un comunicado, Micheli también respondió a los cuestionamientos de la lista rival en el proceso electoral. “Ante lo actuado por el tribunal, se desprende por un lado la transparencia y legitimidad de las elecciones donde 272.000 trabajadores participaron masivamente y, por otro lado, quedaron descartadas las supuestas acusaciones de fraude promovidas por la Lista 10.” Micheli afirma que el tribunal desechó seis impugnaciones de la lista oficialista en otras provincias, aunque reconoce las convocatorias a nuevas elecciones en otras tres, además de las mesas impugnadas de otras siete.
Ahora, se supone que el próximo paso es que la Junta Electoral acate la resolución del tribunal de juristas. Mientras tanto la disputa pasará por quién ocupará el sillón de secretario general hasta que el proceso electoral de la central sindical concluya, ya que ambos contendientes se adjudicaron el sitio.
