La Central de los Trabajadores de la Argentina realizó un acto en el ND/ Ateneo para homenajear a los trabajadores y compañeros detenidos-desaparecidos en la última dictadura cívico militar de nuestro país.

Mil compañeros escucharon el discurso del Secretario General, Hugo Yasky, quien reivindicó la presencia y participación de la juventud en estos últimos años en la organización gremial.

"Si algo tiene que defender la clase trabajadora, es la memoria", expresó el Secretario General y agregó: "La clase trabajadora no nació para ser furgón de cola de la oligarquía".

Refiriéndose al modelo económico instaurado en la última dictadura dijo: "quisieron instaurar un país sin industria, para hacer un país sin clase obrera. Eso fue lo que quiso y quiere la oligarquía".

El titular de la Central recordó la figura del maestro Isauro Arancibia y del dirigente sindical Atilio Santillán asesinados por las fuerzas militares.

En otro tramo de su discurso Yasky hizo referencia a las detenciones de dirigentes sindicales: "Hoy hay dirigentes que van presos por explotar trabajadores, como Venegas y otros que van presos por quitarles la vida a un joven trabajador que luchaba contra las tercerizadas como Pedraza, pero esto no puede servir para estigmatizar a todos los dirigentes sindicales, que en su mayoría no somos ni millonarios ni empresarios".

Yasky inauguró junto a la conducción nacional, un mural realizado por jóvenes artistas de la CTA, que se instalará en el Museo de la Memoria y que fue recibido por su directora, Ana María Careaga.

Federico Luppi, Juan Palomino, Esther Goris, Raúl Rizzo y Norberto Gonzalo, leyeron la carta escrita por Rodolfo Walsh a la junta militar.

Por último cerraron la jornada de la memoria organizado por la CTA, Teresa Parodi y Vox Dei.