22 DE AGOSTO: A 52 AÑOS DE TRELEW

"Seguirán sonando

hasta que salpique

en el mundo

de ‘los sordos’

la sangre guerrera

de los revolucionarios.

Trelew, revolucionario

no has sido aplastado.

Trelew, compañero

no has sido olvidado,

Trelew

¡Hasta la Victoria Siempre!

El Pueblo está gritando".

Alejandro Almeida, detenido desaparecido el 17 de junio de 1975

A mediados de 1972, gobernaba la Argentina una dictadura militar liderada por el general Alejandro Agustín Lanusse. Desde 1968, varias organizaciones guerrilleras habían surgido para combatir la dictadura y cientos de guerrilleros y militantes habían sido encarcelados. En el Penal de Rawson, ubicado en la Patagonia, estaban detenidos alrededor de doscientos presos políticos, militantes de diversas organizaciones armadas (ERP-PRT, FAR y Montoneros).

El 15 de agosto, 25 de esos presos, se fugaron del Penal Militar de máxima seguridad de Rawson y recorrieron 21 kilómetros hasta llegar al Viejo Aeropuerto de Trelew, con el objetivo de llegar a Chile, donde solicitarían refugio político al Gobierno de Salvador Allende.

Solo seis lograron tomar el vuelo hacia el país trasandino. Los diecinueve restantes fueron detenidos y conducidos a la Base Aeronaval Almirante Zar, en Trelew, dependiente de la Armada y, en la madrugada del 22 de agosto, la guardia los obligó a salir de sus celdas. Fueron asesinados: Carlos Astudillo, Rubén Pedro Bonnet, Eduardo Capello, Mario Emilio Delfino, Alfredo Kohon, Susana Lesgart, José Ricardo Mena, Clarisa Lea Place, Miguel Ángel Polti, Mariano Pujadas, Carlos Alberto del Rey, María Angélica Sabelli, Humberto Suárez, Humberto Toschi, Alejandro Ulla y Ana María Villarreal de Santucho, fusilados por un grupo de marinos al mando del Capitán Sosa, acusado por ser el ejecutor de la masacre.

Dieciséis de ellos murieron por los disparos recibidos y tres quedan gravemente heridos. Días después, durante el velatorio de algunos de ellos, irrumpieron en la sede del Partido Justicialista, en Avenida La Plata (Ciudad Autónoma de Buenos Aires), la guardia de Infantería con tanquetas comandadas por uno de los que luego sería el fundador de la Triple A (Alianza Anticomunista Argentina); el Comisario Alberto Villar, secuestrando ataúdes y reprimiendo a los asistentes.

Los tres prisioneros que lograron sobrevivir, luego del golpe de 1976, fueron secuestrados y aún continúan desaparecidos: Alberto Miguel Camps, María Antonia Berger y Ricardo René Haidar.

En 2012, los responsables de los fusilamientos, los ex marinos Luis Sosa, Emilio Del Real y Carlos Marandino, fueron condenados a prisión perpetua por el Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia, considerando a "la Masacre de Trelew" como un delito de lesa humanidad.


Recientemente, el ex marino Roberto Bravo fue declarado responsable de los crímenes ejecutados en la base Almirante Zar. Un jurado popular en la Corte del sur de Florida determinó que fue Bravo quien llevó adelante los fusilamientos de Eduardo Capello, Rubén Bonet y Ana María Villarreal de Santucho y el intento de ejecución extrajudicial de Alberto Camps.

Los y las Trabajadoras de la Educación continuamos con el compromiso en la construcción colectiva de nuestra Memoria, con Verdad, para exigir Justicia y seguir profundizando el camino hacia una Patria justa, libre y soberana, por una Escuela Pública, popular, democrática y con una profunda perspectiva de Derechos Humanos.


¡Hoy todxs ellxs están presentes en nuestra Memoria y en cada lucha que lleva la impronta de lxs Trabajadorxs!

*Video realizado de forma colectiva entre familiares y el CELS, lxs nietxs de quienes sufrieron la masacre hace cincuenta años explican su propia historia sobre lo que ocurrió y por qué quieren compartirla:

https://www.cels.org.ar/web/2022/08/memorias-sobre-trelew-como-lo-cuentan-las-nuevas-generaciones/