Este objetivo se concretó finalmente el 14 de noviembre de 1992 cuando se funda CTA como Congreso de los Trabajadores Argentinos ante la presencia de 2600 delegados, y se firma una declaración de principios, en la cual se establecen las características organizativas que asumiría el nuevo nucleamiento sindical.
La mesa provisoria que quedó conformada en ese encuentro fue integrada por: Cayo S. Ayala (SAON), Víctor De Gennaro (ATE), Mary Sánchez (CTERA), Eduardo Otero (Federación de Vialidad Nacional), Elido Veschi (Asociación de personal de Ferrocarriles), Eduardo Fernández Novoa (Federación Judicial Argentina), Pedro Wasiejko (SUTNA), Roberto Miller (SICA), Alberto José Piccinini (CGT - Villa Constitución), Edgardo Quiroga (CGT - San Lorenzo), Amancio Pafundi y José Zárate (Plenario de organizaciones de jubilados).
Cuando le tocó cerrar a Mary Sánchez, dijo: "No permitamos que nunca más nos dividan. El desafío es transformar la bronca en organización y para ello consolidar la propuesta que aquí se construye".
De allí en más, los pasos dados se orientaron al logro de que ese nuevo espacio, cuya raíz se hallaba en que la Central fuera reconocida oficialmente. Logro recién alcanzado con la elección de autoridades nacionales por medio del voto directo en el año 1995.
FRAGMENTOS DEL DOCUMENTO
"Para volver a creer que es posible una sociedad más justa. Para que nuestra dignidad se ponga en marcha", era el título de la síntesis del encuentro celebrado en Rosario, el 4 de abril de 1992.
"Es este el primer compromiso que aquí asumimos los trabajadores: protagonizar solidariamente los conflictos sociales que son consecuencia directa de las políticas de ajuste salvaje de este gobierno, cuyo análisis realizáramos en los primeros dos documentos surgidos del Encuentro Sindical efectuado en Burzaco, provincia de Buenos Aires, el pasado 17 de diciembre de 1991".
"Este nuevo espacio de UNIDAD DE LOS TRABAJADORES se plantea como independiente de los partidos políticos, del Estado y de los patrones: es por lo tanto AUTÓNOMO. Así lo ofrecemos hoy desde su misma fundación, al conjunto de los sectores comunitarios como espacio de referencia sindical para una estrategia de poder nacional, capaz de transformar en demandas políticas los conflictos sociales concretos que cotidianamente sacuden a nuestro pueblo".
"En este sentido, nuestra preocupación central es lograr que este nuevo espacio sindical se constituya en herramienta eficaz y abierta al resto de la comunidad, para transformar en políticamente productiva la resistencia fragmentada pero cotidiana y sistemática de tantos compatriotas castigados por las políticas gubernamentales. Es necesario terminar ya con la soledad que envuelve a todos los que sufren las consecuencias del MODELO DE PAÍS que se intenta implantar rompiendo el SILENCIO ORGANIZATIVO en el que hace largo tiempo ya estamos sumergidos".
Fuente: Libro "Clase Trabajadora, nuestra historia".