12 DE JULIO: DÍA DE LAS HEROÍNAS Y MÁRTIRES DE LA INDEPENDENCIA AMERICANA

Juana Azurduy, heroína de la Independencia, una de las madres de la Patria latinoamericana.

Juana tuvo comprensión de su tiempo histórico y conciencia emancipatoria, una entrega absoluta en el logro de la Independencia, ejerció la conducción y la organización con valentía y estrategia. Mujer, madre, esposa, compañera, estratega militar y jefa política en tiempos del siglo XIX, allá en el Alto Perú, cuando la Independencia era una utopía y una convicción esperanzadora de los pueblos latinoamericanos.

La visibilidad política de Juana Azurduy, en este tiempo histórico nuestro, es un hito que indica cómo nuestra identidad latinoamericana viene siendo resignificada por los Pueblos del Continente en el marco de un proceso político pleno de luchas y construcciones inéditas.

Con la fuerza de miles de batallas contra las políticas neoliberales, emergieron sujetos sociales dispuestos a construir su propio destino, organizaciones de jóvenes, pueblos originarios, mujeres, trabajadoras, movimientos de derechos humanos, políticos, sociales y sindicales con nuevas agendas de derechos, soberanía económica y de desarrollo, de defensa de los bienes comunes naturales, por distribución de la riqueza y contra la explotación humana. Sujetos políticos en busca de reconstruir aquella matriz que da sentidos a proyectos colectivos, las de las luchas épicas populares, solidarias, de compromiso de vida con lxs otrxs. En ese ideario transformador de realidades se va inscribiendo la construcción de nuestra identidad.

Las luchas por la independencia son parte constitutiva de nuestra impronta emancipatoria, se gestaron en el desafío y la resistencia al orden del dominio político, social, cultural y económico establecido por España, fue así que pueblos de este Continente persiguieron la concretización de sus ideales de libertad. Y más allá de las distancias inalcanzables, el aislamiento y los escasos recursos, se organizaron en ejércitos multiculturales, con gauchxs, pueblos originarios, europeos emancipatorios, mujeres, afrodescendientes, para enfrentarse a un poderoso imperio español y a su ejército realista, vencedor de Napoleón y con la más alta tecnología armamentística de la época.

Juana nació en Chuquisaca en tiempos de la rebelión de Túpac Amaru y de declaraciones de independencias, fue compañera de armas de Martín Güemes y Manuel Belgrano, quien le dio su sable en el reconocimiento como Teniente Coronel "con uniforme". Luego, Simón Bolívar la nombró "heroína" y le decretó una pensión vitalicia que nunca recibió. Eran temibles sus cargas de caballería al vuelo de su caballo con sus ejércitos, "Los Leales" y "Las Amazonas", con este último logró la integración plena de la mujer en la guerra independentista.

"¿Es de mujeres solo tener hijxs, perderles, cruzarse de brazos, mientras tantos se unen para liberarnos?".

Una revolucionaria, protagonista de la historia grande, en tiempos que el orden social le imponía ser mujer con miriñaque y abanicos.

Nuestro homenaje a Juana y a todas las Juanas latinoamericanas es el sostenimiento de sus sueños y convicciones emancipadoras

Dos naciones, Argentina y Bolivia, realizan conjuntamente un reconocimiento a la generala Juana Azurduy a través de un monumento que viene a testimoniar la hermandad latinoamericana. En un riquísimo proceso político continental del que somos parte, ese compromiso de fraternidad nos plantea el desafío de avanzar en una unidad e integración de acción y agenda de pueblos soberanos construyendo emancipación colectiva.

La visibilización social de grupos étnico culturales que lucharon por nuestra emancipación suele ser denostada por sectores sociales y políticos de derecha. Se proponen reescribir la historia continuamente y erosionar la memoria de las luchas populares. Así ocurrió en el período del Gobierno neoliberal del 2015 /19 con el traslado del monumento a Juana, inicialmente sin nuevo destino, o con intención de destrucción. De su ubicación primera en cercanía a la Casa Rosada, se logró que finalmente el Gobierno definiera una nueva ubicación. Quedó Juana sosteniendo su espada frente al CCK. Hoy, el autodenominado Gobierno libertario, es una nueva expresión de los sectores dominantes, del poder económico concentrado que promueve una nueva etapa de neocolonialismo, neoliberalismo y neofascismo. Juana representa la lucha de lxs invisibilizadxs que siguen construyendo solidaridad, comunidad organizada y luchando cotidianamente por la concreción de una Latinoamérica emancipada y de un país justo y solidario.

Estamos convencidxs de que juntxs lograremos, "más temprano que tarde", pacífica y firmemente el Mar para Bolivia y Malvinas para Argentina y la definitiva independencia para América Latina.

Texto basado en la publicación "Mujeres en revolución" - Silvia Almazán – SUTEBA - 2015.