La actividad estuvo a cargo de la Enfermera Mabel Galeano -integrante del CAP Marina Vilte de Lomas de Zamora- quien brindó una charla de concientización sobre la necesidad de disminuir o abandonar el consumo de cigarrillo en la población docente y su grupo familiar, haciendo anclaje en los materiales elaborados por la Secretaría de Salud del SUTEBA.
Galeano comentó los puntos más sobresalientes del encuentro: “Los participantes se mostraron muy interesados y, entre autoreproches y risas, se charló sobre la importancia de dejar el hábito de fumar, tomando como excusa el Día Mundial sin Tabaco. Algunos docentes solicitaron los folletos para llevar a sus escuelas, compartir con otros colegas y trabajar junto a los alumnos.”
Otro de los ejes abordados por la integrante del equipo de salud de SUTEBA fue el de los daños en la población pediátrica. Teniendo en cuenta que se avecina la temporada de infecciones respiratorias; destacó que el fumar de los adultos tiene consecuencias negativas en los niños y en este contexto mucho más.
Si dejás de fumar...
Los beneficios se notarán en el mismo instante en el que se apaga el cigarrillo. Ademas, alivia los síntomas de la tos y la expectoración; disminuye las sibilancias (“silbidos” del pecho); reduce el riesgo de infarto de corazón; se recupera el olfato y se disfruta más.
Tomá nota!!
A los 20 minutos: La presión y el pulso retornan a los valores normales.
A las 8 hs: La nicotina y el monóxido de carbono en la sangre se reducen a la mitad. El oxígeno en la sangre vuelve a los valores normales.
A las 24 hs: El monóxido de carbono ha sido eliminado y los pulmones comienzan a eliminar residuos del cigarrillo.
Alas 48 hs: Ya no hay nicotina en el organismo. El sentido del olfato y el gusto mejoran mucho.
A las 72 hs: Respirar es más fácil, las vías aéreas comienzan a relajarse y aumentan los niveles de energía.
A los 6 meses: Se reducen la tos y la expectoración, los resfríos, las bronquitis.
Entre 1 y 9 meses: disminuye el riesgo de infecciones.
Al año: Es menor el riesgo de trombosis o embolias cerebrales y se reduce a la mitad el riesgo de infarto agudo en miocardio.
A los 5 años: El riesgo de padecer infarto se iguala al de las personas que nunca fumaron y se reduce a la mitad el riesgo de padecer cáncer de pulmón.
A los 10 años: El riesgo de padecer cáncer de pulmón es igual a un no fumador.